Cuando el señor ex gobernador Pablo Ardila, adquirió la explotación arenera muy sonada por las circunstancias en que lo tienen, ya que la investigaciones indican una realidad, Empero, se indicó que resarcía por la suma de $5 mil millones, los equivalentes. Hoy día se viene realizando la explotación con una draga, esta que ha ocasionado grandes perjuicios a los habitantes de la rivera del río Magdalena, más exactamente en el sector de la Isla del sol, acabando con los solares y las tierras de estos ribereños.
El limitante que tenían los areneros, al realizar esta labor de una forma artesanal, ha pasado a la industrialización, sin tener en cuenta los efectos colaterales que ello conlleva. No sabemos si en esta explotación los señores de la CAR han otorgado un permiso para la explotación mediante este mecanismo; no podrán tapar el sol con una mano y negarnos que no utilizan este mecanismo, como lo podemos observar en la foto. Actualmente se lleva a cabo una negociación donde presumo que no es muy favorable el acuerdo a que están llegando la mayoría de los areneros, puesto que los daños oscilan para cada uno de ellos muy posiblemente en unos $200 millones, sin incluir los daños ambientales.
Frente a estos hechos nos preguntamos ¿Qué ha hecho la CAR, Cormagdalena, las autoridades municipales de Ricaurte y el Ministerio del Medio Ambiente?
Por: Eco. Víctor F. Manrique
Unidad Investigativa
ONG GIRARCOLOMBIA
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